Brasil: estrellas jugando en el brasileirao

Desde hace varios años se dice que Brasil va camino a convertirse en una de las grandes potencias del nuevo mapa mundial. Es parte del grupo BRIC, que nuclea a los cuatro países con más posibilidades de crecimiento en el mediano plazo: Brasil, Rusia, India y China. En Latinoamérica es el faro al que todos siguen y el líder económico de la región. Decimos todo esto para darle un contexto extradeportivo a la historia, porque todos sabemos lo que significa este país para el fútbol mundial.

Ese desarrollo económico se trasladó a los clubes, que comenzaron a invertir mucho más que en otras épocas y ya se animan a disputarle la contratación de los mejores jugadores a los gigantes europeos. El Mundial 2014 ha tenido bastante que ver en este buen momento del torneo brasileño, ya que todos los equipos del país quieren vestirse de gala para la gran ocasión.

Las inversiones llegan desde varios sectores y la contratación de figuras sudamericanas es uno de los principales destinos de ese dinero. Hoy, muchos de los futbolistas más destacados de los torneos argentino, chileno, colombiano o uruguayo tienen grandes posibilidades de pasar al Brasileirao sin que eso signifique perder dinero en el camino.

Andres D'Alessandro (Inter de Porto Alegre)

Hay varios ejemplos en este sentido. El de Andrés D'Alessandro es el más notorio, sin dudas. El ex mediocampista de River Plate y San Lorenzo tenía edad y categoría para intentar dar el salto a algún equipo grande de Europa cuando Internacional lo contrató en 2008. En el conjunto gaúcho, el argentino ganó la Copa Libertadores 2010 y fue el mejor futbolista del equipo durante varias temporadas. Pese a ese gran nivel, no se movió de Porto Alegre.

Diego Forlan (Inter de Porto Alegre)

Inter es el club que más creció en la última década. Ganó dos Libertadores y peleó varios títulos de Brasil. Además, contrató a varios de los mejores futbolistas del vecino país, como Mario Bolatti y Fernando Cavenaghi. En los últimos días se quedó con el mejor del último Mundial, el uruguayo Diego Forlán, quien llega desde el Inter de Italia con su talento intacto.

Otro de los puntos a destacar en este momento del fútbol brasileño tiene que ver con los jóvenes. Los clubes han logrado modificar aquello de "país exportador" y ahora disfrutan uno poco más de sus figuras. Para seguir hablando de Inter, vale destacar que Leandro Damiao y Oscar, quienes ya juegan en la Selección mayor, se mantienen en el plantel pese a las ofertas europeas. De hecho, hace horas Chelsea mostró su interés por este último.

Por su parte, Santos ha logrado conservar en sus filas a la gran aparición brasileña de los últimos tiempos. Neymar es pretendido por Real Madrid y Barcelona, pero la institución paulista le renovó contrato hasta 2014 y el crack pagó con una Libertadores, la primera desde las épocas de Pelé. Para eso, recibe un sueldo europeo con la ayuda de los patrocinadores. Su fiel compañero, Paulo Ganso, también sigue firme en el Peixe.

Neymar (Santos)

Aunque el hecho de no vender a los juveniles es, sin duda, lo más valioso de este proyecto, lo que hizo crecer el interés en los hinchas todavía más fue la "repatriación" de las estrellas. En 2009 un Ronaldo amado por todos pero con muchos problemas físicos fue contratado por Corinthians y provocó una revolución. Luego, los resultados deportivos no fueron los esperados, pero el camino ya estaba marcado.

Ronaldo

Dos años después, el otro gran futbolista brasileño de la década, Ronaldinho, imitó al Fenómeno y llegó a Flamengo. El desenlace fue similar, pero ahora Dinho tiene una oportunidad de revancha en Atlético Mineiro. El tercero de esta trilogía de "cracks post Romario" es Rivaldo, quien también regresó, aunque lo hizo con más edad y casi no jugó en Sao Paulo.

Ronaldinho (Botafogo)

Deco jugó para la Selección de Portugal y fue una de las figuras del Barcelona campeón de la Champions 2006. Años después regresó a su país y condujo a Fluminense al título en el Brasileirao. En dicho equipo carioca también se destacaron futbolistas internacionales como Rafael Moura y Fred, quien aún hoy es una de las grandes figuras del Flu.

Deco (Fluminense)

Luis Fabiano fue el centrodelantero del Seleccionado de Brasil durante varios años y regresó a su nación cuando todavía tenía mucho para dar. En la actualidad, se desempeña en Sao Paulo y va en busca de su primer título brasileño. Allí lo acompaña Lucas Moura, otra de las jóvenes promesas que aún no dio el salto hacia el viejo continente.

Luis Fabiano (Sao Paulo)

Lyon ganó siete títulos de Liga consecutivos en Francia y Juninho Pernambucano tuvo mucho que ver en esa seguidilla inigualable. El crack nacido en Recife regresó a su país en 2011 para jugar en Vasco da Gama y, lejos de comenzar a pensar en el retiro, lideró al equipo rumbo al título en la Copa de Brasil y a los cuartos de final de la Copa Libertadores.

Juninho Pernambucano (Vasco da Gama)

Vágner Love, Ze Roberto, Keirrison, Dida, Gilberto Silva y Daniel Carvalho también eligieron volver cuando todavía tenían mucho para dar. Lo mismo ocurre con el peruano Paolo Guerrero, quien jugará en Corinthians, el uruguayo Sebastián Abreu, que brilló en Botafogo y ahora buscará hacer lo mismo en Figueirense, y Clarence Seedorf, la primera superestrella europea que puede abrir el camino para la llegada de más cracks de ese continente.

Vagner Love (Flamengo)

Aún faltan dos años para la Copa del Mundo, pero Brasil ya se prepara para recibir a los astros de todos los rincones del planeta. Para acostumbrarse a esa sensación, ya comenzó a abrirle las puertas a muchas grandes figuras. Eso prestigia aún más al ya extraordinario fútbol brasileño.